El supermercado Publix (donde ya no solo comprar es un placer), escenario de la historia, se ha fijado con cierta inconstancia. Anoche mismo se dijo que era “el de Miracle Mile“; que debe ser el de Lejeune y Andalusia (andaluchia); depués ha sido rectificado, señalándose a Flager y la 37, o la 42. No importa: el asunto es que se trata de un Publix en Miami donde se vieron las caras Juanita Castro y Miguel Saavedra. Dos cubanos de Miami que tienen diferente opinión acerca de… el libro de la primera. Así solo sea porque ella gozó escribiéndolo, y él triturándolo.
Según Manuel Prieres, que circuló la información (verifiqué personalmente con Prieres y el propio Saavedra la confirmó hoy a las 2:00 de la tarde en la estación radial La Poderosa), este y la hermana de los Castro se encontraron la noche de Halloween en el departamento de vegetales de la cadena comercial y se cruzaron frases encendidas: “¡Tú lo que eres un comunista!”, le dijo ella. Y el respondió: “¡Aquí la única comunista eres tú!”.
Miguel Saavedra llegó al exilio miamense en el año 1965; Juana Castro en el 1964. Además del calendario exiliar, ambos comparten una escala axiológica donde ser “comunista” es un antivalor. En eso coinciden. Al menos y casi al manos, porque Juana quería fajarse y todo.
La verdad que, como están las cosas en este inmenso CDR en que se está convirtiendo Miami, el debate juanomiguelista es esperanzador.
-LUSTRACIÓN: Especial de Garrincha
Ni Juana Castro ni Miguel Saavedra son comunistas. Los dos son, desde mi punto de vista, victimas del castrismo. Una, sufriendolo mas que ideologicamente desde el punto de vista filial. El otro, ejerciendo su derecho a expresar sus opiniones y sus sentimientos. No creo que a ninguno de los dos los anime la mala fe. Ambos se han enfrentado al castrismo por senderos diferentes. Pero la meta es la misma.
ResponderEliminarYo creo que la fustracion de ambos hace ver al otro como el enemigo,pero me parece que es como dice el otro comentario la meta es la misma pero hasta que no superemos esta vanidad no podremos llegar al dorado,de lo contrario preceremos como perros rabiosos tratando de comernos los unos a los otros y esa siempre a sido la tarea del castrismo,que nos matemos entre si.
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