Wednesday, March 17, 2010
Todos Somos Cubanos
El asesinato por el régimen cubano del joven disidente Orlando Zapata Tamayo el pasado 23 de febrero y la huelga de hambre que actualmente mantiene Guillermo Fariñas Hernández, hace más de tres semanas en Santa Clara, han suscitado una serie de debates en el exilio cubano por motivo del origen racial de los implicados.
Algunas personas argumentan en diferentes partes del mundo, a través de los medios informativos, que los cubanos de piel negra son más valientes que sus compatriotas blancos y que el protagonismo de Zapata y Fariñas es un hecho heroico que solo los ciudadanos de piel oscura están dispuestos hacer.
Los que fundamentan estas intrigas desconocen al pueblo de Cuba y olvidan que a lo largo de nuestra historia, negros, blancos y mulatos, han estado unidos en defensa del país y contra todo tipo de injusticia.
José Martí y Juan Gualberto Gómez, Antonio Maceo y Carlos Manuel de Céspedes, Boitel y Zapata, entre otros tantos, son los mejores ejemplos para ilustrar, que antes discusiones estériles acerca del origen racial, ha estado el compromiso de todos los cubanos con los valores de la libertad.
Los que alimentan esas intrigas, insistiendo en separar a los cubanos por el color de su piel, están cometiendo un grave error cuyas consecuencias pueden ser lamentables para el futuro democrático de la isla.
La confrontación no es el camino para resolver el prejuicio racial que históricamente ha existido en Cuba. Sólo el entendimiento, que emana de una educación sostenible y moderna, puede convertirse en el vehículo que cambie la percepción de aquellos ciudadanos, que equivocadamente, crean sentirse superiores a otros por su origen racial.
Distinguir entre cubanos blancos y negros es una excusa lamentable e injustificada, sobre todo entre aquellos que luchan para salvaguardar al pueblo de Cuba del totalitarismo de los hermanos Castro. La dictadura cubana SI es racista y siempre ha tomado en cuenta el color ideológico de los ciudadanos, para luego actuar de manera cruel contra todos los que piensen diferentes, sin importarle su origen racial, credo y/o opinión política.
Orlando Zapata y Guillermo Fariñas son, por encima de cualquier particularidad de sus genes y fenotipos, cubanos comprometidos con la libertad de su patria, siendo capaces del mayor sacrificio, como en su momento lo hizo Pedro Luis Boitel
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Algunas personas argumentan en diferentes partes del mundo, a través de los medios informativos, que los cubanos de piel negra son más valientes que sus compatriotas blancos y que el protagonismo de Zapata y Fariñas es un hecho heroico que solo los ciudadanos de piel oscura están dispuestos hacer.
Los que fundamentan estas intrigas desconocen al pueblo de Cuba y olvidan que a lo largo de nuestra historia, negros, blancos y mulatos, han estado unidos en defensa del país y contra todo tipo de injusticia.
José Martí y Juan Gualberto Gómez, Antonio Maceo y Carlos Manuel de Céspedes, Boitel y Zapata, entre otros tantos, son los mejores ejemplos para ilustrar, que antes discusiones estériles acerca del origen racial, ha estado el compromiso de todos los cubanos con los valores de la libertad.
Los que alimentan esas intrigas, insistiendo en separar a los cubanos por el color de su piel, están cometiendo un grave error cuyas consecuencias pueden ser lamentables para el futuro democrático de la isla.
La confrontación no es el camino para resolver el prejuicio racial que históricamente ha existido en Cuba. Sólo el entendimiento, que emana de una educación sostenible y moderna, puede convertirse en el vehículo que cambie la percepción de aquellos ciudadanos, que equivocadamente, crean sentirse superiores a otros por su origen racial.
Distinguir entre cubanos blancos y negros es una excusa lamentable e injustificada, sobre todo entre aquellos que luchan para salvaguardar al pueblo de Cuba del totalitarismo de los hermanos Castro. La dictadura cubana SI es racista y siempre ha tomado en cuenta el color ideológico de los ciudadanos, para luego actuar de manera cruel contra todos los que piensen diferentes, sin importarle su origen racial, credo y/o opinión política.
Orlando Zapata y Guillermo Fariñas son, por encima de cualquier particularidad de sus genes y fenotipos, cubanos comprometidos con la libertad de su patria, siendo capaces del mayor sacrificio, como en su momento lo hizo Pedro Luis Boitel
Ahora resulta que los cubanos blancos discriminamos a los negros cubanos , ajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja.
ResponderEliminarDEMAGOGOS , eso es lo qie son estos OPORTUNISTAS que dicen querer la LIBERTAD para CUBA , HP es lo que son , yo soy RADICAL y no entiendo con los BABOSOS que creen que aquello con BLA BLA BLA se cae .