Por Manuel Prieres
Siempre recuerdo mi primera infancia en Yateras donde naci. Vivia en un mundo muy bonito por lo sencillo y natural. Mis primeros marzos transcurrian rodeado de un habitat fertil, colmado de imagenes, ruidos, colores, fragancias, grandes extensiones de campo abierto donde se confundian los despoblados llanos con las encrespadas elevaciones. La altura a veces me molestaba los oidos, a la vez que el limpio rio Palenquito saciaba mi sed cada vez que lo cruzaba. El rigor del trabajo de campo me obligaba, aunque muy chico, a levantarme a las 2 de la madrugada y acostarme cuando oscurecia. Nunca se podia descansar los domingos porque habia que extraerle la leche a las vacas. Saludable, fuerte como un toro, pero ignorante al nom plus ultra que me convertia en una presa facil de madrugar.
Asi llego el 3 de octubre de 1963
---En nombre de la Revolucion y el Estado Socialista, sus propiedades estan siendo intervenidas en este momento.
Era el comisario comunista Machado, escoltado por dos jovenes milicianos armados con sendas ametralladoras Pepechas de fabricacion sovietica, que nos salian al paso a la llegada nuestra a Rancho Kso provenientes de la ciudad de Guantanamo. El cabecilla le advirtio a mi padre que no se bajara del jeep que yo manejaba, que no podia poner un pie mas sobre aquella tierra que ya no le pertenecia.
La vivienda nuestra, donde naci, en la Finca Virginia de Yateras fue robada por los comunistas convirtiendola en una ergastula donde se interrogaban a los contrarrevolucionarios que caian en manos de la Seguridad del Estado.
El Rancho KSO, donde despues creci y vivi por tanto tiempo en Santa Maria-Guantanamo, fue usurpado tambien por los comunistas y convertido de igual manera en sala de interrogatorios y torturas a los prisioneros anti comunistas.
Hoy dia la casa en Santa Maria que fue nuestro hogar esta totalmente abandonada y destruida por los intrusos que la han habitado…
Al ser mis padres y yo despojados de nuestras propiedades tuvimos que ir a vivir a la ciudad de Guantanamo en una vivienda tan diminuta que no caviamos los tres. Permaneciendo ahi hasta que nos marchamos del pais. Recuerdo, jamas se me podra olvidar, cuando un miembro del Ministerio del Interior clausuro para siempre para nosotros las puertas de nuestra humilde morada en Agramonte 857, y vi como el comisario rojo con piel de ebano se llevaba el inconfundible paragua de mi anciano padre a modo de trofeo arrancado a los gusanos que se iban.
Como tantos y tantos cubanos, tuvimos que partir hacia lo lejano, hacia lo desconocido, con treinta libras de pertenencias en tres maletas de lona amarilla conocidas como gusanos.
Partimos de nuestro pais, sin bienes, sin recursos, sin herencias. Sin nada. Se tuvo que empezar de nuevo en cero. Mi anciano padre no pudo resistir mas a sus 84 febreros el trasplante de un Continente a Otro y murio en Madrid.
De los Prieres quedamos dos, mi madre y yo. Pero de inmediato uniendose a la familia, Sarah, mi esposa de siempre. Poco despues agrandandose la familia con Manuel Angel y mas tarde Sarah Fe (nuestros hijos, uno nacido en Madrid, y otra en Hialeah).
Ha pasado el tiempo, mucho tiempo, y aqui ahora en Miami gravita, como Espada de Damocles sobre nuestras cabezas la posibilidad de otra vez perder la Propiedad en que vivimos actualmente como en el pasado.
Recuerdo que llegamos a Miami, procedente de Madrid, un 14 de febrero de 1974, Dia de los Enamorados. Una nueva vida comenzaba.
Habiamos llegado al civilizado, democratico y libre mundo, que es la sociedad estadounidense. Lo que mas me gusto fue lo contrastante de la vida ciudadana. Se podia respirar el sello que hace realidad el esfuerzo cotidiano, el trabajo, la inteligencia para echar para alante. Comprobe que llegaba a un fertil terreno de convivencia para comenzar de nuevo. Donde solo se necesitaba, dedicacion, mucho pero mucho trabajo, disciplina como vivir, y la verificacion de que lo que alcanzabas con tu esfuerzo y sacrificio era respetado y valorizado,
Exacto. El respeto a la Propiedad Privada. Elemento connatural al ser humano. Ya lo habia expresado Santo Tomas de Aquino.
Miami, a mi llegada, era un compendio de desafio personal como al mismo tiempo la complacencia que suscita la aventura. En Miami no se imponia la uniformidad como la vemos en las sociedades socialistas donde las viviendas resultan enormes cajones mas parecidos a palomares que sitios a donde vivir.
Habiamos empezado una nueva vida en un lugar que con el paso del tiempo se iba transformando. Creciendo hacia arriba, poblandose portuariamente, y expandiendose hacia el oeste.
A la distancia de este 2011, si mirasemos hacia atras comprobaremos que ya se ha vivido mas en Miami que en la propia Cuba. Espectadores y testigos hemos sido de acontecimientos imposible de olvidar y marcados por ellos nosotros al mismo tiempo, como El Exodo por el Mariel, el Ciclon Andrew, la desviacion hacia Guantanamo de cubanos que querian hacer otro Mariel en 1994, Elian…
A 34 años de mi llegada aqui, mirando hacia atras, constato lo sangreado que ha sido para nuestra familia iniciar una nueva vida escogiendo el camino de la laboriosidad, la formalidad, la sencillez, la honradez.
Cuanta razon tienes en todo lo que escribes Manolito, yo a diferencia de ti no tengo esa paciencia y te admiro por tu tezon, por tu integridad moral y la dignidad civica ante todos estos hechos que solo dan a entender el interes de muchos por el billete y no por ver a un cubano libre y soberano, muy lejos de toda la realidad vivida desde el 59, lejos de toda clase de basofia y de seres putrefactos, todos esos que han sido comlices y asesinos, colaboradores del regimen de los castros, los mafiosos mas protejidos por los intereses americanos.
ResponderEliminarUn saludo hermano.
Dios te bendiga, hermano tambien.
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