Opinión
No hay límite…
Silvio J Blanco
Cuando conocemos de tanta maldad, de tanta desigualdad e injusticia en este mundo nuestro, casi llegamos a la conclusión que tales males no tienen límite. Veamos dos ejemplos:
En Miami, el natural hábitat de la jauría contrarrevolucionaria, un connotado “disidente” que vomita palabras por Radio Martí, afirmó algo realmente insólito; no se asombre y mucho menos dude, comprometo mi palabra que lo dijo así: “…en Santa Clara le erigieron una estatua inmensa, colosal, a Ernesto Che Guevara, que es un elemento negativo que tanto odio, tanto luto, tanta sangre vertió en nuestro país”. ¿Qué le parece?. Es como si nos escupieran el rostro, terriblemente bochornoso que esa bestia pronunciara tales palabras, es, en suma, un grosero insulto a nuestro país, a la inteligencia de los cubanos, y hasta un ridículo llevado al límite, porque incluso, algunos de los adversarios de nuestro Ché se vieron obligados a respetarlo, aun cuando no coincidieran con su elevado pensamiento.
Como todos recordarán, hace algún tiempo nuestra prensa informó, en detalles, el caso de un “disidente” de nombre Orlando Zapata Tamayo, el cual murió en momentos en que extinguía una condena por delitos comunes, y a partir de aquel suceso convertido en “mártir de la patria” por obra y gracia de la mafia de Miami. Pero no les bastó y se sumaron al carro de la propaganda anticubana, tan carcomida y podrida, hasta altas autoridades yanquis, entre ellas la propia secretaria de Estado Hillary Clinton y, obviamente, la bruja del Capitolio Ileana Ross, Lincoln Díaz-Balart y otros execrables personajes y personajillos de la misma cloaca. Centenares de declaraciones y entrevistas a la madre de Zapata y otros familiares realizadas por Radio y Televisión Martí, inundaban el espectro informativo del enemigo. Todo un entramado publicitario, para ellos muy válido si de denigrar a Cuba se trata.
Fíjese, estimado lector, en algunos elementos informativos que el enemigo propaga, y así podrá comprobar por qué titulo “No hay límite” a este comentario. Veamos:
a) La madre de Orlando Zapata, llegó al aeropuerto internacional de Miami acompañada de su esposo, cuatro hijos y otros siete familiares. 13 en total, (¿será que aprovecharon la muerte del finado para marchar al país de la libertad?
b) Fue recibida por activistas de derechos humanos, líderes comunitarios y figuras políticas,
c) Dijo sentirse aliviada de tener en Miami las cenizas de su hijo, al que le construirán un monumento.
d) Manifestó que le daba las gracias al pueblo de los Estados Unidos, al Gobierno y a todas las personas que han luchado para que hoy su familia se encuentre en un país libre.
e) Afirmó que con mucho dolor y sentimiento, se vio obligada a abandonar su patria, porque en Cuba la estaban maltratando y haciéndole imposible su vida.
f) Ha reiterado con gran insistencia su agradecimiento, extensivo al propio presidente Barack Obama.
g) En los Estados Unidos ya le han garantizado, para todos, vivienda, alimentos, trabajo y otras condiciones favorables.
h) La madre de Orlando Zapata, Reina Luisa Tamayo, se autodefine como “la Mariana Grajales que llegó a Miami procedente de Cuba” (¡qué insulto, cará!), y que “preferían morir todos antes que ser doblegados” ¿será patriota todo el familión?
i) Las cenizas de Zapata serán depositadas en el mausoleo de los “héroes” de Bahía de Cochinos o Asociación de Veteranos de la brigada 2506, hasta tanto le erijan un monumento a su propio hijo. Hasta aquí estos elementos. Solo me resta llamar su atención en algunos aspectos:
1) Los que hacen un homenaje a su hijo y a ella, son los que han hecho lo mismo a Luis Posada Carriles, el connotado terrorista internacional.
2) El país que vive de las guerras y el sufrimiento ajeno es el que recibe muchas loas.
3) Parecen orgullosos de que las cenizas de Zapata vayan a parar, precisamente, a un símbolo de los que quisieron y no lograron, ensangrentar y aplastar a su propia patria.
Solo con los dos ejemplos mencionados se puede reafirmar, una vez más, que en ese mundo nauseabundo de Miami todo lo más despreciable es posible, porque sencillamente…no hay límite.
Prieres te vieron entrando hoy al concierto de Carlos Varela, bueno dime te gusto?
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