EL LLAMADO DE CHECHEA

EL LLAMADO DE CHECHEA

@Por Manuel Prieres  

Llegamos a la residencia situada al sur de la ciudad invitados al cumpleaños de nuestra coterranea Gisela Gonzalez Frannea (cariñosamente para muchos: Chechea). El cielo encapotado amenazando lluvia. Iba a llamar a la puerta cuando escuchamos la inconfundible música mejicana de mariachis proveniente del interior de la casa. Pensé que nos habíamos equivocado de dirección, de todas formas entramos y al ver a Agustín Novellas (Accatone) haciendo de “cicerón” claro que habíamos llegado a nuestro destino.

Poco a poco fuimos identificando a algunos de los presentes, pero muchos no. Sin embargo todos de una forma u otra habíamos coincidido en el tiempo en nuestro querido e inolvidable Guantánamo.

No podia resultar más acogedor  y agradable el ambiente que al llegar comenzamos a respirar. Los organizadores del encuentro con CHECHEA no habían escatimado  en lo más mínimo para que los presentes nos sitiéramos “bomba”.

Y lo lograron.

Fue algo muy bonito y emocionante encontrarnos con muchas personas de nuestro mismo pueblo que nos volvimos a ver después de muchos años teniendo que mirar hacia atrás, al pasado, para recordarnos.

Concluyo con una metáfora: “En la puerta de entrada nos despojamos de nuestras alforjas particulares para solamente quedarnos con algo que nos unía a todos: el recuerdo imborrable del lugar donde proveníamos, del que partimos un día”.

Chechea: gracias por haber escogido a Miami para tu llamado.

@Manuel Prieres

Miami, 6-26-2018