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Edmundo García pasó en la edición del viernes 21 de marzo (2014) de La Tarde se Mueve una entrevista que le hizo a Berta Soler.
García no fue complaciente. Berta tampoco.
Lo curioso del diálogo es que las preguntas que García le hizo a Berta: ¿Cuánto cobra una Dama de Blanco? ¿Cuánto cobra una “Dama de apoyo”? ¿Tuviste bateo con Yolanda Huerga? ¿Eres autoritaria? ¿La Fundación te da dinero?, etc., se las pudo haber hecho cualquier periodista de Miami: Juan Tamayo, Roberto Rodríguez Tejera, Pedro Haza Salazar, etc.
No se las hicieron porque sus jefes se lo prohibieron, o porque ellos mismos creyeron que preguntas semejantes habrían sido una descortesía con la luchadora democrática.
Sin embargo, Berta Soler no tuvo ningún inconveniente en contestárselas a Edmundo García; e incluso dijo que no hubo trato irrespetuoso en el diálogo.
De este evento se puede concluir que los periodistas anticastristas de Miami no solo no han ayudado a la democracia en Cuba; sino que además han perdido profesionalmente muchos años, haciendo preguntas bobas y previsibles que al final ni siquiera los mismos opositores agradecen.
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