@Manuel
Prieres
Coterraneo.
El
14 de Agosto del 2015 frente al Malecón habanero el Secretario de Estado John
Kerry izaba la bandera estadounidense dando por terminada así una ausencia de
más de medio siglo.
Final
de un largo período de rivalidad entre
la “Revolución Comunista de Cuba y el Imperialismo Yanqui”. Eso habrá de significar que al pueblo cubano
en su totalidad se le destinaría ser leño que
alimentase la caldera de la gran “Guerra Madre de todas las Guerras” contra el
Imperialismo Yanqui “cercano”, “poderoso”, “ingerencista”, que hasta el propio Fidel Castro en muchas
ocasiones impugnaba: “todos los esfuerzos y sacrificios serán pocos contra los
Americanos”.
El histórico 12-17-14 dio al traste con el diferendo EE.UU. - Cuba anunciado simultaneamente por
Barack Hussein Obama y Raúl Castro, mientras John Kerry en su discurso frente
al malecón habanero con tono persuasivo
leía : “hora es que tanto Estados Unidos como Cuba
abandonen sus diferencias y rivalidades ya que a un final somos vecinos”.
Monseñor Dionisio, coterráneo: Por medio siglo el pueblo cubano en suma ha
sido condenado a formar parte de un proyecto- internacional anti Imperialista
de mucha embergadura pero con consecuencias y resultados irrecuperables. Tirios
como Troyanos, Montescos como Capuletos, Revolucionarios como
Contrarrevolucionarios, Cubanos fuera como dentro de la isla, pero todos parte
de una épica y traumática experiencia dejando imborrable estela en el ADN nacional
cubano.
Lo que intento decirle es que en las misas que
oficiará Francisco próximamente a lo largo y ancho de Cuba y que sin dudas estará la representación
oficial del gobierno revolucionario de Cuba en primera fila, aprovecho para recordarle
que también deberían estar convidados esos
cubanos representantes de la Cuba no gubernamental al mismo nivel de categoría
que el oficialismo.
En el mismo
palco, nada de lunetas de segundas ni terceras como hubo de ocurrir con Mister
Kerry y su famoso cocktail a la disidencia-oposición cubana.
Esta Carta
Abierta dirigida a usted , monseñor Dionisio, aspira a que le haga saber a Francisco sobre nuestra preocupación que
vaya a repetirse el mismo garrafal y ofensivo desaguisado de John Kerry.
No se le hace eso a un pueblo embarcado en una interminable“utopia”
nacional hecha trizas el 17 de diciembre del 2014 en la mejor tradición
orweliana cuando puercos y granjeros se reconciliaron alrededor de una rústica
mesa.
Se dice que “a la tercera es la vencida”. Juan
Pablo, Benedicto, Francisco; pero ahora en la visita del Papa Francisco a Cuba
se plantea un escenario diferente. Tiempos estos que el mundo no tiene más que
palabras de elogios, solidaridad y enhorabuenas para la Revolución Comunista de
Cuba.
Parabienes a
nivel global.
En Cuba, Papa Francisco, no bastará la apoteosis en
los actos religiosos que se celebrarán. No bastarán las Homilias. No bastarán
los encuentros con la familia Castro. No
bastarán esos 4,000 invitados VIPs. No bastará esa atmósfera portátil religiosa
que ha acompañado la presencia de los Papas en Cuba per se.
En esta
ocasión se necesitará un ACTO que venga de usted Papa Francisco que rompa con lo hasta ahora establecido: Su firme determinación de
plantearle a “Punto Cero” que la “OPOSICION deberá de estar al mismo nivel y distancia que
el OFICIALISMO”.
Un acto que rompa con ese maleficio sobre un pueblo Tratado de París 1898 & iza de la bandera Agosto 14 del 2O15.
Tome nota Monseñor Dionisio García Ibañez.
Usted
testigo de excepción del largo peregrinar del catolicismo cubano en tiempos de
revolución.
A la Tercera es la Vencida, o No.
@Manuel Prieres
Miami “Tierra Firme”
8-25-2015
-----------------------------------
-----------------------------------
No hay comentarios:
Publicar un comentario