Foto tomada de Google Internet
LORDs
DE LA MASS MEDIA MIAMENSE 2014
Por @ MANUEL PRIERES
"Dedicado al Periodismo Cubano de Miami; toda una historia, pura tradición".
Desafortunadamente hoy día son muchas las razones, las evidencias, que nos dicen que el fenómeno del PCM (Periodismo Cubano Miamense) de los 80s no se volverá a repetir debido a toda una serie de factores que conspiran para ello.
Conspira ese profesional de hoy haciendo periodismo que sencillamente es un activista de agendas ideológicas y políticas pero nunca informador de la historia real sino gacetillero de la "formal" y la "oficial". Hay comentaristas y articulistas, jefes, oficiales, voceros, de organizaciones quienes olímpicamente sacrifican la verdad en aras de su "línea oficial" como el que se toma un vaso de agua fría.
Conspira esa izquierda liberal cubana de nuevo cuño haciendo periodismo -formada en la democracia occidental- pero que no conoce "ni papa" del comunismo en sus mañas y maneras y sin embargo diariamente, como gota de agua, pretende sentar cátedra.
Conspira ese profesional de la la TV. -lector de tele prompter- pero que sin embargo día a día procura hacer la labor de avezado comentarista y articulista por el solo hecho de estar frente a una cámara de televisión leyendo y leyendo. Las barrabasadas que se les escucha como "comentarista" son de argollas.
Conspira ese "paracaidista de la Underwood" llegado recientemente de La Havana con un pasado "pro oficialista" que no se lo brinca un chivo, y que por obra de los "abridores de puertas" criollos en Miami (parientes de aquellos "abridores de puertas" en Toledo que con nocturnidad permitieron la entrada de los moros por 700 años) es sembrado en el periodismo cubano miamense (PCM) con una facilidad metemiedo. Con talento y oficio, lleno de originalidad y vocación, sí, pero con un gran "Talón de Aquiles": el haber crecido y formado en el comunismo. Como consecuencia trae todo un lastre que por algún misterio no quiere botar por la borda, persiste en guardárselo. Está en Miami este "paracaidista de la Underwood"; pero, cuidado, practicando eso de "junto pero no revuelto" con el Exilio Histórico. Cierto que desentona, cierto que cae mal y hasta repudiado a veces por esa familia que es el PCM, pero no obstante a ello: tolerado.
Es la civilidad, es la libertad de expresión practicada en este pueblo.
No obstante, y a propósito de la Brecha Generacional en el Periodismo Cubano Miamense (PCM), hay que celebrar que no todo es negativo en el análisis. Por ejemplo, de un tiempo a esta parte están enquistándose milagrosamente en el PCM contemporáneo una falange de cubanos y no cubanos neo-conservadores en la mejor tradición de Bill Oreilly, S. Hannity, Rush Limbaugh, dando mucho que hablar en estos momentos. Cierto que su desafío resulta muy incómodo y lleno de obstáculos al tener que medir fuerzas con esa, hoy día mayoritaria, bien colocada y llena de recursos, ala-liberal-de izquierda cubana en el PCM.
Asímismo, y en este contexto, hay que ver cómo algunos comentaristas y articulistas provenientes de la EPOCA DE ORO del PCM y que todavía crean corrientes de opinión en sus respectivos medios, aunque ya demasiados cansados y fuera de foco con relación a los nuevos tiempos, en sus ansias de permanecer aún al pie del cañon se nos antojan patéticamente de modé aunque tozudamente resistidos a soltar.
Si quisiéramos buscarle un denominador común al PCM de hoy día, tenemos con tristeza que convenir que está evolucionando gradualmente hacia una Piñata Mediática poderosa, llena de recursos económicos y hight tec; sí; pero elitista, monopolista y enajenadora de la historia real. Algo muy parecido a lo ocurrido, por décadas, en la prensa de EE.UU. (liberal) hasta la llegada de la Fox News (conservadora), así como esa fuerza consevadora (de derecha) ocupando simeros puestos dentro de las redes sociales.
Una Piñata Mediática, concluímos, no democrática, censora y coto cerrado, donde los portones de sus medios están totalmente programados para que los securitys solamente dejen pasar a los "escogidos", a los "elegidos", a los "cúmbilas ideológicos".
Veinte años atrás los mass media del PCM no necesitaban securitys frente a sus entradas.
Manuel Prieres @
DE LA MASS MEDIA MIAMENSE 2014
Por @ MANUEL PRIERES
"Dedicado al Periodismo Cubano de Miami; toda una historia, pura tradición".
Desafortunadamente hoy día son muchas las razones, las evidencias, que nos dicen que el fenómeno del PCM (Periodismo Cubano Miamense) de los 80s no se volverá a repetir debido a toda una serie de factores que conspiran para ello.
Conspira ese profesional de hoy haciendo periodismo que sencillamente es un activista de agendas ideológicas y políticas pero nunca informador de la historia real sino gacetillero de la "formal" y la "oficial". Hay comentaristas y articulistas, jefes, oficiales, voceros, de organizaciones quienes olímpicamente sacrifican la verdad en aras de su "línea oficial" como el que se toma un vaso de agua fría.
Conspira esa izquierda liberal cubana de nuevo cuño haciendo periodismo -formada en la democracia occidental- pero que no conoce "ni papa" del comunismo en sus mañas y maneras y sin embargo diariamente, como gota de agua, pretende sentar cátedra.
Conspira ese profesional de la la TV. -lector de tele prompter- pero que sin embargo día a día procura hacer la labor de avezado comentarista y articulista por el solo hecho de estar frente a una cámara de televisión leyendo y leyendo. Las barrabasadas que se les escucha como "comentarista" son de argollas.
Conspira ese "paracaidista de la Underwood" llegado recientemente de La Havana con un pasado "pro oficialista" que no se lo brinca un chivo, y que por obra de los "abridores de puertas" criollos en Miami (parientes de aquellos "abridores de puertas" en Toledo que con nocturnidad permitieron la entrada de los moros por 700 años) es sembrado en el periodismo cubano miamense (PCM) con una facilidad metemiedo. Con talento y oficio, lleno de originalidad y vocación, sí, pero con un gran "Talón de Aquiles": el haber crecido y formado en el comunismo. Como consecuencia trae todo un lastre que por algún misterio no quiere botar por la borda, persiste en guardárselo. Está en Miami este "paracaidista de la Underwood"; pero, cuidado, practicando eso de "junto pero no revuelto" con el Exilio Histórico. Cierto que desentona, cierto que cae mal y hasta repudiado a veces por esa familia que es el PCM, pero no obstante a ello: tolerado.
Es la civilidad, es la libertad de expresión practicada en este pueblo.
No obstante, y a propósito de la Brecha Generacional en el Periodismo Cubano Miamense (PCM), hay que celebrar que no todo es negativo en el análisis. Por ejemplo, de un tiempo a esta parte están enquistándose milagrosamente en el PCM contemporáneo una falange de cubanos y no cubanos neo-conservadores en la mejor tradición de Bill Oreilly, S. Hannity, Rush Limbaugh, dando mucho que hablar en estos momentos. Cierto que su desafío resulta muy incómodo y lleno de obstáculos al tener que medir fuerzas con esa, hoy día mayoritaria, bien colocada y llena de recursos, ala-liberal-de izquierda cubana en el PCM.
Asímismo, y en este contexto, hay que ver cómo algunos comentaristas y articulistas provenientes de la EPOCA DE ORO del PCM y que todavía crean corrientes de opinión en sus respectivos medios, aunque ya demasiados cansados y fuera de foco con relación a los nuevos tiempos, en sus ansias de permanecer aún al pie del cañon se nos antojan patéticamente de modé aunque tozudamente resistidos a soltar.
Si quisiéramos buscarle un denominador común al PCM de hoy día, tenemos con tristeza que convenir que está evolucionando gradualmente hacia una Piñata Mediática poderosa, llena de recursos económicos y hight tec; sí; pero elitista, monopolista y enajenadora de la historia real. Algo muy parecido a lo ocurrido, por décadas, en la prensa de EE.UU. (liberal) hasta la llegada de la Fox News (conservadora), así como esa fuerza consevadora (de derecha) ocupando simeros puestos dentro de las redes sociales.
Una Piñata Mediática, concluímos, no democrática, censora y coto cerrado, donde los portones de sus medios están totalmente programados para que los securitys solamente dejen pasar a los "escogidos", a los "elegidos", a los "cúmbilas ideológicos".
Veinte años atrás los mass media del PCM no necesitaban securitys frente a sus entradas.
Manuel Prieres @
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