Foto de la lider de Vigilia Mambisa Laura Vianello
La Dictadura de la Desfachatez.
Por Alejandro Cantón
Board member of GCC
Podrá parecer retórica, quizás ensañamiento; otros dirán que estoy obsesionado o tal vez que no tengo más nada de qué hablar que no sea el mismo tema. Si, ya se que lo imaginan, el Canal 41 y el programa a Mano Limpia, mi fuente de inspiración preferida pues despiertan en mi ese sentimiento de frustración que no me deja avanzar con claridad y que inevitablemente me carcome el cerebro y el alma.
La desvergüenza continúa, la falta de respeto y el intento de humillar a los cubanos siguen siendo plato de primera en medio de la mediocridad del programa. Día a día, en una actitud enfermiza se le da seguimiento a lo que ellos llaman “la realidad cubana”; documentales dentro de la isla, fotografías, testimonios, los famosos expertos que suelen asistir a diario, los analistas, los desvergonzados que se prestan para tan truculento e insidioso programa. Pero a veces me siento a solas, reflexiono, y me pregunto si Haza y su coletilla de escritores y productores, entre los cuales casualmente no parece existir discordancia alguna en el enfoque político, aún cuando ni idea tengan de la realidad cubana, son lo que verdaderamente merece el televidente de esta ciudad. Estoy por convencerme de que es así, que es el programa adecuado, el conductor perfecto, los productores necesarios, la patraña deseada por los televidentes que siguiendo viajas costumbres de avestruces de su tierra natal, solo tienden a meter la cabeza en tierra y con ello agitar la esencia del programita, que es el aferramiento absoluto a la idea de separar a los cubanos y de ayudar a la perpetuación de eso mismo que ellos mastican incansablemente, tragan sin escrúpulos y luego devuelven como bolo alimenticio de rumiante con el nombre de Dictadura.
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